Solución basada en la tecnología del anillo de agua que utiliza el agua de mar como fuente de intercambio. La instalación también está preparada para aprovechar el agua subterránea que sale de la fragmentación de piedra caliza que forma el suelo de la cantera y luego continúa hacia el lecho marino.

Este recurso renovable y estable en el tiempo proporciona agua a temperatura siempre favorable al anillo técnico, que sirve a toda la bahía con las 18 centrales térmicas y frigoríficas ubicadas en esta, dotadas de bombas de calor monobloque agua-agua reversibles de alta eficiencia Clivet.

Las bombas de calor Clivet producen agua caliente y refrigerada, así como agua caliente sanitaria para los diversos usuarios: desde el hotel y el spa, a las unidades de vivienda y las zonas comerciales. Proporcionan la energía solo donde y cuando se necesita, según el principio de la descentralización, y modulan el funcionamiento propio en relación a los requisitos puntuales de comodidad y a las condiciones externas, aprovechando también la función de free-cooling en las estaciones intermedias.

La distribución del fluido caliente o frío dentro de los distintos edificios se realiza a través de suelos radiantes, ventiloconvectores Clivet de alta eficiencia y reducido nivel de ruido, y radiadores toalleros. Todas las bombas de calor se alimentan exclusivamente con energía eléctrica, así como las cocinas de inducción, eliminando completamente el uso de gas o gasóleo.

En el burgo también hay 200 m2 de paneles solares, colocados en los techos de los edificios de estilo moderno, que contribuyen al calentamiento de alta eficiencia del agua sanitaria.

Para obtener resultados excelentes son fundamentales la descentralización y la modulación en las que se inspira el sistema de climatización, que responde puntualmente a las exigencias de comodidad, optimizando el uso de los recursos en función de la ocupación de los edificios en las distintas estaciones y en función de las variaciones climáticas.

La alimentación completamente eléctrica, ya sea de las bombas de calor o de los distintos equipos domésticos, ha permitido eliminar completamente las emisiones de gases de combustión para lograr una ciudad completamente ecológica.

Además, los vehículos no pueden circular por el burgo y todos los aparcamientos son subterráneos. También se ha logrado completamente el desafío del confort acústico a través de la instalación de cristaleras laminadas especializadas en el control acústico, que ofrecen una reducción de ruido de 45 dB (-1: -5), y de terminales ELFOSpace de Clivet con emisión sonora de solo 44 db (a 1 metro).